Invertir en Nuestras Comunidades

La última recuperación económica trajo consigo un aumento en el empleo, sin embargo, el crecimiento se dio a menudo en ocupaciones mal remuneradas. Aunque había más trabajos, no ofrecían a las personas las oportunidades que necesitan para salir de la pobreza y tener un futuro mejor.

Los suburbios se están empobreciendo. Desde el año 2000, el número de personas de bajos ingresos – que viven por debajo del umbral de pobreza federal en un 125% – aumentó en un alarmante 77% en el condado suburbano de Cook.

Además de los bajos salarios, existe una desconexión entre la ubicación de los empleos y la ubicación de la vivienda asequible en y alrededor del Condado de Cook. ¿De qué sirve un trabajo si la persona no puede llegar a él? Y si un individuo necesita mudarse más cerca, ¿cómo se supone que pueda costear la mudanza cuando no puede pagar las facturas existentes?

Los salarios estancados y los trabajos de mala calidad hacen que sea difícil escapar de la pobreza. El 40% de las personas encuestadas indicaron que encontrar un trabajo para mantener a su familia era una prioridad principal. Ahora, con tasas de desempleo que aumentan al décuple cada semana, la necesidad de oportunidades laborales estables es crítica.

En abril de 2020, el desempleo en el condado de Cook aumentó a 18.2% desde un 4.8% en marzo.* Las personas que se quedan sin trabajo se enfrentan a una mayor sensación de inseguridad a medida que una pandemia cambia la forma en que nosotros como país volveremos al trabajo. Ya las empresas han comenzado a reestructurarse.

La reestructuración afecta considerablemente a los trabajadores que no tienen conocimientos técnicos y poseen un nivel de educación más bajo. Corren el riesgo de convertirse en daños colaterales en este nuevo mercado laboral, especialmente si carecen de la educación o formación para destacarse.

Casi 100,000 adolescentes y jóvenes en Chicagoland no están ni estudiando ni trabajando, careciendo de las habilidades y educación que los trabajos bien remunerados requieren.

Es hora de dar a nuestros vecinos un lugar en la mesa. Para aumentar las oportunidades de educación y formación profesional con el objetivo final de crear carreras estables para adultos y jóvenes en todo el condado, CEDA invierte en:

• Desarrollando un centro de entrenamiento de última generación de 35,000 pies cuadrados en South Holland, IL.
• Ampliando el acceso a la educación postsecundaria y la capacitación de habilidades para adultos y jóvenes.
• Establecer asociaciones con empresas y otras organizaciones para aumentar las oportunidades laborales de los trabajadores con bajos salarios y buscadores de empleo, así como la reserva de candidatos con las habilidades que buscan los empleadores.

Cuando las personas tienen las habilidades y la educación, tienen la oportunidad de comenzar trabajos que los llevarán a desarrollar carreras profesionales.

Un empleo significativo es un componente clave para sacar a las personas de la pobreza.

La pobreza no puede ser erradicada sin empleos y oportunidades de aprendizaje. Si nuestros vecinos continúan viviendo de cheque en cheque y apenas, si es que lo hacen, satisfacen sus necesidades básicas, nuestra comunidad no puede prosperar. La inversión en el cambio es críticamente necesaria para que Chicagoland se RECONSTRUYA cuando termine la crisis del COVID-19.

Siempre buscamos formas innovadoras de proporcionar a jóvenes y adultos que viven en la pobreza en el condado de Cook un lugar en la mesa. Cuando se realiza una inversión en las personas y las estructuras que las apoyan, pueden invertir en sus familias y comunidades y romper el ciclo de la pobreza. No podemos acabar con la pobreza sin ti. Ayuda a dar a individuos en toda la región de Chicago un lugar en la mesa.

Invierte hoy